Estamos asistiendo a cambios metodológicos importantes en lo relativo a la realización de cursos de formación. Está adquiriendo protagonismo nuevos métodos de aprendizaje, como es el caso del e-learning.
Las nuevas tecnologías y la flexibilidad y potencial que ofrece Internet ha supuesto un incremento notable en el desarrollo de la formación on line o virtual, esto es el e-learning.
La tendencia general es la de desarrollar cursos cortos y específicos, adaptados a las necesidades formativas de cada organización o usuario.
El éxito del e-learning vendrá condicionado mayoritariamente por la calidad de los contenidos y la usabilidad de la plataforma en se desarrolla, así como la integración de todos los elementos que intervienen en el proceso formativo.
Por otra parte, los expertos aconsejan incorporar alguna sesión presencial para explicar el funcionamiento de la aplicación, realizar tutorías o actividades. La combinación de formación on-line y presencial deriva en el b-learning (blended learning) o formación mixta.
Las principales ventajas que ofrece el e-learning frente a los medios tradicionales de formación asistencial son: la movilidad, la flexibilidad horaria, la rapidez, el control, su accesibilidad, la estructuración de las materias a impartir, la homogeneidad de contenidos, la diversidad de materiales interactivos y la constante actualización de contenidos.
Existen en el mercado diferentes y potentes plataformas de e-learning para gestionar todos los aspectos relativos a la formación on-line: gestión de cursos, usuarios, actualización contenidos, etc.
Cualquier empresa que desee desarrollar cursos mediante este sistema debe de evaluar la plataforma que usará. Así pues, antes de decidirse por una plataforma determinada es conveniente:
- evaluar la calidad y características de la plataforma
- probar la herramienta realizando algún curso (no limitarse a leer el dossier con todas las bondades del producto y navegar un par de pantallas por la versión demode un curso).
- buscar y considerar la alternativa en formación presencial o la combinación con la misma (b-learning o formación mixta)
- realizar una experiencia piloto con un grupo reducido de trabajadores y hacer un seguimiento de cerca de todo el desarrollo del curso (problemas encontrados, usabilidad, motivación, tutorías...) así como de los resultados (conocimientos y habilidades adquiridas, grado de satisfacción, sugerencias...).
- asegurar aspectos como soporte técnico, atención al cliente, formación tutores o actualizaciones posteriores de cursos o contenidos.
De igual forma, la elección de una solución o plataforma de e-learning, así como la creación, diseño y estructuración de los materiales y recursos didácticos son etapas fundamentales que se han de abordar con rigor (por ejemplo hay que evitar el despliegue de recursos multimedia e interactivos que no aportan nada o muy poco al aprendizaje).
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